top of page
  • Marcela Mortean

Il Toscano, un pedazo de Italia en Chile


Me desperté con el despertador, que me decía "Es hora de ir a trabajar." Son las diez de la mañana de un Domingo que amanece sin sol; tal vez el día tiene la misma pereza que yo para salir de la cama. Todavía soñolienta tomo un baño caliente que da nuevas fuerzas para mi cuerpo. Hoy es mi último día de trabajo, y tal vez por eso la voluntad de vivir lentamente cada proceso se ha hecho cargo de mí.

Hace exactamente dos meses repito esta rutina, y lo hago con cariño. Llegamos a la ciudad de El Quisco, costa de Chile, el 1 de enero de 2016 para tratar de conseguir un trabajo y ganar algo de dinero para continuar nuestro viaje. Y así fue; trabajamos en un lindo restaurante italiano.

FOTO 1: Il Toscano, un pedazo de Italia en Chile.

Cuando pienso en Italia, me viene inmediatamente a la cabeza música, comida y familia. Siempre imagino una Italia con la Tarantella al fondo, restaurantes que exhalan albahaca, y familias numerosas, siempre reunidas en las casas y en las calles, abrazandose y demostrando su afecto. Llegar al Il Toscano fue encontrar todo esto; era como si, por magia, saliéramos de Chile y entráramos en Italia.

El lenguaje, los gestos, los olores y los sonidos que me llenaban de nostalgia por mi casa, mis padres y mis hermanas, que no tienen nada de italianos, que son tan diferentes, pero tienen la misma ternura y coraje de amar y transmitir esta afección delante de todos y en todo momento. Vivir eso a diario aumentó en nosotros el deseo de cruzar el Atlántico y vivir más intensamente esta Italia que nos fue presentada tan cariñosamente aquí en Chile.

Foto 2: Elizabeth preparando fideos.

Elizabeth, propietaria del restaurante, chilena, vivió muchos años en Italia, donde se casó y tuvo sus hermosas hijas Brenda y Beatriz. Volvieron a Chile recientemente y abriron el restaurante, que es un éxito. Considerado como el mejor restaurante italiano en Chile por su deliciosa comida, por la especial bienvenida y por el lindo lugar, que sorprendentemente conduce a todos a imaginarse en Toscana.

Cómo somos viajeros (me encanta esta definición), y sin mucha experiencia de trabajo en grandes restaurantes, somos responsables por lavar los platos en la tarde (Alan), y ayudar a Elizabeth, proprietaria y cheff, en la preparación de los platos (yo). Confieso que me sentí privilegiada de poder ocupar una posición tan especial, porque siempre me ha gustado cocinar y sería una gran oportunidad para aprender, aprender y aprender. Y así sucedió. Alan lavó muchos platos, tazas, copas, ollas y cubiertos; también secó y ayudó a guardar; yo no creía que él iba a ser rápido para realizar esta tarea, pero me sorprendió con su organización y eficiencia. Y yo he aprendido mucho acerca de texturas, condimentos y sabores de la cocina italiana.

Foto 3: Alan lavando platos

Llegamos para trabajar, y sin conocernos, Elizabeth nos ha contratado. Trabajamos duro durante la temporada de verano y ganamos bien ... Quiero decir, ganamos muy bien, ya que además del sueldo al final de cada mes, recibimos el mejor pagado de todo: su amistad y afecto. Siempre nos regalaba con deliciosas comidas hechas por ella, siempre nos recebía con una hermosa sonrisa y un cálido abrazo todos los días, incluso cuando no todo iba bien.

Foto 4: Gracias Elizabeth!!! Tienes nuestro gran afecto siempre

La idea de escribir este texto surgió como una manera de agradecer a todo el equipo, especialmente a Elizabeth. Agradecemos a los amigos que hicimos, compañeros de trabajo y de fiesta, que siempre nos han ayudado. Damos las gracias al universo por la hermosa familia que nos dio, de la que hoy formamos parte, porque juntos hemos construido momentos que están internalizados en nuestros corazones.

Arrivederci!!!

Foto 5: Equipo Il Toscano.

4 visualizações0 comentário
bottom of page